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Pasos hacia la calma
Soy Estela Millán, especialista en Mindfulness e Inteligencia Emocional y hoy os hablaré de los cuatro pasos necesarios que cada persona debería llevar a cabo para conseguir calma en su vida:
1. Cambia la forma de comunicarte
En primer lugar, es necesario poner especial atención en nuestra forma de comunicarnos. La comunicación amable elimina conflictos casi de forma mágica. Lo más difícil es aprender a comunicar de manera amable. A continuación, te mostraré algunas palabras y actitudes clave que son esenciales para comunicarte de manera positiva:
- Gracias: la gratitud es una de las cosas más sencillas para renovar nuestra vibración y nuestras ganas. Dar gracias cada día por todo lo que tienes incluso te cambia el humor a mejor.
- Te quiero: decir «te quiero», demostrarlo y vivirlo como algo prioritario. No vale decir ya lo saben, no, es necesario escucharlo aunque solo sea de vez en cuando.
- Paciencia: respira varias veces antes de decir algo de lo que te puedas arrepentir y sobre todo, aprende a permitir que los demás hagan las cosas a su manera y a la velocidad que necesiten, no a la tuya.
- Constancia: hoy en día ser constante marca la diferencia, ya te has dado cuenta de las cosas que empezamos y que no terminamos, por eso es importante el recordar por qué empezaste, y seguir.
- Amabilidad: ser amable debería ser un modo de vida, cuidar a las personas, las conozcas o no. Palabras y gestos que en el día a día hacen posible que nuestras relaciones sean más sanas.
- Alegría: si puedes hacer todo lo anterior no hay ni que decir que lo que aparece como por arte de magia es una alegría interna capaz de transformar cualquier momento o situación que antes nos incomodaba. Vive con la alegría en tu corazón.
2. Elige un momento para hacer una pausa
Es esencial escoger un momento del día para hacer un parón y reflexionar. En ese momento, respira profundo y cierra los ojos. El objetivo es ser consciente y vivir el momento.
3. Hazte cargo de tu mundo emocional
Hay que ser conscientes de que poner tu mundo emocional en manos de otra persona te roba la calma. Debemos asumir y hacernos cargo de nuestro mundo emocional. Es una cuestión de responsabilidad. Cuida, respeta y comprende tus emociones.
4. El objetivo final es tu bienestar personal
Piensa que todo esto que estás haciendo, te acerca a tu bienestar personal. Quizá el primer paso no te lleve donde quieres pero te saca de donde estás. El objetivo final es estar bien contigo mismo, en ese punto es cuando lograremos la calma. Pon en práctica cada día el hacer pequeñas pausas en diferentes momentos y verás que todo se vive de otra forma.